
SenilidadPor pura senilidad, le bautizaron Teo con cuatro años, él ya respondía como Nando. Cuando Don Mateo recibió al padre de la criatura, Don Teodoro (quien, de las tres últimas hijas que había traído a cristianar recién nacidas, solo sobrevivieron semanas) y a la "Señá Nati" (16 partos ya, casi todos con la maldición de alumbrar hembras) con Nando de la mano, les saludó con un ¿Pero, este no es Teodorito? ¡Cómo has crecido!Senilidad...